
Roberto, a quien conocí en el verano de 2003 en una sala de revelado de fotografía de la Universität der Künste de Berlín y quien me he ido encontrando por la noche berlinesa de tanto en tanto, nos ofrece en el texto introductorio de su nueva entrega fotográfica el origen espiritual del símbolo del árbol inverso: "Los árboles invertidos aparecen en la cábala hebrea y en la iconografía religiosa india y cristiana, representando la sabiduría y cualidades de Dios. En el siglo XIII Hadewijch de Amberes, en pleno éxtasis, en la primera de sus visiones describe cómo un ángel la lleva a un jardín en cuyo centro se encuentra el árbol invertido. Es el árbol del conocimiento de Dios".
La inversión de lo natural para simbolizar a dios, y el espíritu en cierta manera subversivo que supone invertir lo natural. O como escribe el mismo Roberto: "Esta operación tan simple conlleva algo más que un mero cambio perceptivo: también participa de una actidud contestataria; se trata de la protesta básica y legítima de invertir (y subvertir) lo real buscando lo inesperado, lo lúdico y lo crítico".
Hasta el próximo 2 de febrero podréis visitar la exposición. Y hoy, la inauguración a partir de las 19:00 horas, con el músico alicantino Manolator con un "concierto-video" y con todo lo que conlleva acudir a una vernissage berlinesa un viernes por la tarde.
La inversión de lo natural para simbolizar a dios, y el espíritu en cierta manera subversivo que supone invertir lo natural. O como escribe el mismo Roberto: "Esta operación tan simple conlleva algo más que un mero cambio perceptivo: también participa de una actidud contestataria; se trata de la protesta básica y legítima de invertir (y subvertir) lo real buscando lo inesperado, lo lúdico y lo crítico".
Hasta el próximo 2 de febrero podréis visitar la exposición. Y hoy, la inauguración a partir de las 19:00 horas, con el músico alicantino Manolator con un "concierto-video" y con todo lo que conlleva acudir a una vernissage berlinesa un viernes por la tarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario